Al final del camino encontre la luz, donde tu mano extendida buscaba la mia, la luz se hizo en tus ojos, brillantes me miraron y del infierno me rescataron.
Sentí que la vida me favorecia , cuando tus manos y las mias se entrelazarón, nos unimos en uno y con un beso sellamos nuestro destino.
No hay un adios, solo una distancia que nos separa El Olvido solo es el comienzo de algo nuevo Ante cualquier situación, el reloj nunca para. todo pasa

miércoles, 1 de octubre de 2008

Adios...Adios...



Con la puerta abierta ,sentada en el tocador
miraba su rostro desgarrado por el dolor,
una pasada al pelo . una lágrima al compás
veía su vida pasar,
¿Que hacia allí?
contemplar su rostro envejecido por los años
arrugas de dolor,
¿Que hacia allí?
Ver la vida pasar como años atrás
donde los días eran todos iguales,
pasables entre la multitud,
una voz en su interior gritaba, estas sola.
¿Que hacia allí?
Dejarse morir con elegancia,
quería estar bella para lo inminente,
la muerte seria su aliada aquella madrugada,
con una sonrisa se acostó y se dejo llevar,
abandonaba la soledad.
Adiós, su rostro decía adiós.

7 si quieres... Opina aqui.:

Anónimo dijo...

precioso,triste pero precioso, me encanta como escribes y cada dia es mejor un besazo enorme....

. dijo...

Odio los adioses.


Un besito!

Dylan Forrester dijo...

La muerte es solo otra puerta que la vida nos abre.
Buenos versos.

Un abrazo...

josef dijo...

Hola amnesia. Que texto tan profundo y hermoso has escrito. Sí, las arrugas a veces son como heridas de guerra que laceran nuestra autoestima y hay que aprender a superarlas. Una cosa me gustó mucho. Cuando muera querría estar bello y expresar serenidad. Por desgracia eso muy pocos lo consiguen, aunque creo que puede lograrse de una forma terrible pero a la vez sincera: Asumiendo que tu ciclo ha terminado en esta vida y después, quién sabe...? Un abrazo!

josef dijo...

Una cosa. Infinitas gracias por poner mi enlace. Queda hasta bien y todo jajaja...ciao...

Unknown dijo...

Triste pero bonito, no me gustaría morir solo sin saber que deje a alguien que me quería

Anónimo dijo...

Jamás me gustaron las despedidas. Odio la palabra adiós. Pero tu poema me gustó. Espero que no sufras ausencias en el alma. Cuídate.